viernes, 21 de julio de 2017

Del referéndum festero al “22, 23 i 24 mai”



Polémicas sobre el calendario festero siempre las ha habido y, al perecer, siempre las habrá. Y si no que se lo digan a Sanus cuando en 1997 le montaron la manifestación que, entre otras muchas causas, acabó con su carrera política. Los hay que piensan que las fiestas de San Jorge hay que dejarlas eternamente los días 22, 23 y 24 de abril (siempre que la Semana Santa lo permita) para mantener las tradiciones y otros que quieren que se celebren el fin de semana más cercano al día 23 para que puedan disfrutarlas los alcoyanos que viven fuera, para que acudan muchos más turistas y para que las empresas alcoyanas no se vean perjudicadas con festivos a mitad de semana. Allá cada cual con su opinión. Lo que está claro es que quien sabe manejar estas cuestiones a la perfección es nuestro actual Alcalde, Toni Francés.

Hagamos un poco de memoria. Eran los primeros días de 2014 cuando una noticia saltó a todos los medios informativos locales: el Ayuntamiento pretendía realizar un referéndum a todos los alcoyanos. ¿El motivo? Conocer la opinión de la ciudadanía sobre las fechas en que se deberían celebrar las Fiestas de Moros y Cristianos.

Han pasado ya más de tres años, pero recuerdo que por aquel entonces, a poco más de un año para las siguientes elecciones municipales, el tripartito había estallado en mil pedazos tras la salida del Bloc (o Compromis como prefieren ellos) por el escándalo del Calderón y del concierto de Sabina y Serrat mientras Paco Agulló, por parte de EU ejercía de tonto útil, votando todo a favor de Francés con una mano tapándose la nariz y Jorge Sedano abandonaba, junto con dos concejales, el PP para pasar a los no adscritos que tantas votaciones le salvaron al Alcalde

El clima político era irrespirable y al maestro de las cortinas de humo se le ocurrió la genial idea de resucitar la polémica del calendario festero. No importaba que no hubiese realizado ni una sola de las promesas hechas en campaña electoral ni que hubiese dinamitado el gran proyecto de la izquierda valenciana, el tripartito, con sus ansias de poder. Francés sabía que lo único que les importa a los alcoyanos es “la Festa y que con ese referéndum, nadie hablaría de otros temas durante varios meses.


No se cómo todavía ninguno de nuestros escritores ha plasmado en un sainete lo que se vivió aquellos días. La primera noticia nos la dio a principios de marzo el “fuerza de choque” de Francés, el concejal de fiestas, Jordi Martínez, hablándonos de una consulta popular que, previsiblemente se realizaría durante las elecciones al Parlamento Europeo, del 25 de mayo de 2014 para abaratar costes. Según sus palabras, “se conseguirá que la ciudadanía se pronuncie sobre un tema que siempre genera polémica”. 

Ante los rumores de que aquella consulta era imposible, el propio Martínez salía otra vez a la palestra unos días después diciendo que una disposición adicional de no se sabe qué ley permitía la realización de consultas populares por la Junta Electoral Central (JEC). No tardó en aparecer el concejal del PP, Fernando Pastor, diciendo que Martínez se lo había inventado y que la JEC había decidido desautorizar al Ayuntamiento de Alcoy la utilización de las infraestructuras de las Elecciones Europeas para llevar a cabo la consulta popular.

Nuevamente Martínez ataca y hasta se atreve a hacer pública la supuesta pregunta:

“¿Qué opción escoge para la celebración de las Fiestas de Moros y Cristianos?

Opción A: 22, 23 y 24 de abril con las excepciones actuales de Semana Santa.

Opción B: Trasladar las Fiestas al fin de semana más próximo al 23 de abril.”

Al mismo tiempo, anuncia que se celebrará un Pleno Extraordinario (con el dineral que cuesta) para tratar la decisión definitiva sobre la realización de la consulta.

Compromís sale a escena y dice que ya que se va a gastar un dineral con el Pleno Extraordinario y con el posible referéndum, que porqué no se preguntan más cosas a la población como, por ejemplo, el uso definitivo que se le tenía que dar al edificio de la Plaçeta de la Mare de Deu. Ya sabemos, pasados unos años, que el uso es, tras la bajada de pantalones de Toni Francés (que los suyos ahora mandan en la Generalitat) el originario, el de ser los juzgados de Alcoy.

También contraataca Pastor, explicando que el Consejo de Ministros tiene que autorizar la consulta y que, de media, tarda un año en hacerlo. Si la consulta tenía que ser el 25 de mayo y estamos a mitad de marzo…

Finalmente, el 17 de marzo se realiza el Pleno Extraordinario, votando a favor de la consulta el PSOE y EU (de nuevo con la nariz tapada) y las abstenciones del PP, Compromís y los no adscritos. Por lo tanto, sin mayoría suficiente, no se aprueba la realización del referéndum.  


A pesar de la negativa, el trabajo ya estaba hecho. En la calle, a falta de un mes para las fiestas, ya no se hablaba de otra cosa; los periodistas llenaban los periódicos con editoriales sobre el tema y los políticos se echaban mutuamente la culpa del fracaso de la consulta. Nadie se acordó de los graves problemas de la ciudad ni de la guerra en el ayuntamiento. 

¿Realmente le importaba a Francés la opinión de los alcoyanos sobre el calendario festero?

Evidentemente, no. Y prueba de ello es que pasados tres años, nos topamos con la noticia de la reunión que ha mantenido nuestro alcalde con el presidente de la Asociación de San Jorge en la que se han consensuado las fechas de la celebración de las fiestas, pero no sólo para el próximo año, ¡sino hasta 2020! De una tacada.


Con su proverbial costumbre de “nadar y guardar la ropa”, Toni ha conseguido dejar contentos a los tradicionalistas manteniendo los días 22, 23 y 24 de abril para el próximo año, a pesar de caer el día de las Entradas en domingo, con el consiguiente perjuicio para el turismo y la industria alcoyanas, ha cambiado a mayo las del 2019 por ser Semana Santa  a finales de abril y ha satisfecho a hosteleros y empresarios modificando al fin de semana del 25 y 26 de abril de 2020 la celebración de la trilogía festera.


Rápidamente, sus amigos del Consell Econòmic i Social (CES), formado por políticos, sindicalistas, empresarios, Aitex y la Mancomunitat, han dado su aprobación. ¡Todos contentos! ¿Y la ciudadanía? Pues lo de siempre: que le d… y a tragar con lo que decida el señor Alcalde. ¿Referéndum? Sólo cuando les convenga alardear de la tan manida utopía de la “soberanía popular”. Total, no lo van a organizar nunca…


viernes, 9 de septiembre de 2016

La “caca de colom” o la nueva cortina de humo de Toni Francés







Suelo escuchar la intervención mensual de nuestro alcalde, Toni Francés, en Radio Alcoy, respondiendo preguntas de los oyentes. Y no lo hago por enterarme sobre como está la ciudad o sobre cuales son los proyectos inmediatos que se van a realizar, porque de eso nos informa más bien poco; lo escucho porque me encanta su valía para convencer a los ciudadanos de que su trabajo es útil y exhaustivo y por su facilidad a la hora de esquivar preguntas conflictivas.

Legendaria fue aquella contestación, allá por el mes de mayo o junio, a un runner alcoyano preocupado por el futuro de la popularmente llamada “pista del Colacao” ante la inminente construcción de la ciudad deportiva del Alcoyano. Con pasmosa tranquilidad, le contestó que hablaría con los técnicos del ayuntamiento (algo que repite una docena de veces en cada programa) pero que su prioridad como alcalde era que no disminuyesen las zonas verdes sino que proliferasen. Y lo irónico fue que lo dijo al día siguiente de aparecer su fotografía en todos los medios informativos descubriendo el cartel que anuncia las obras a las puertas del polideportivo, cartel en el que se ve claramente que la pinada que alberga la “pista del Colacao” desaparece completamente del mapa. No le pude ver la cara, pero conociéndolo, estoy seguro de que ni se sonrojó ni movió una ceja mientras contestó al oyente.


Una de las cosas que más admiro es el poder de convocatoria de nuestro alcalde. Me explico: los programas con participación de los oyentes (salvo si pueden ganar algún premio) han desaparecido prácticamente de las parrillas radiofónicas por falta de llamadas y los pocos que quedan, tienen una participación mínima. Como ejemplo, en la misma Radio Alcoy, los lunes emiten el programa “suya es la radio” (en donde se puede denunciar públicamente cualquier problema local) y apenas llama nadie. Cuatro o cinco llamadas en el mejor de los casos.

Sin embargo, cuando acude Toni Francés, los oyentes se desmandan, las llamadas se multiplican y siempre se queda más de uno sin poder entrar en antena. Si, de acuerdo que sólo va una vez al mes, pero también acude a otros medios de comunicación periódicamente, concede entrevistas y, según él mismo dice, atiende, tanto en la Alcaldía como por la calle, a quien se lo solicita. ¿Por qué siempre esta elevada participación de los oyentes?


Pero lo que más me sorprende es la temática de las preguntas que le hacen al señor alcalde. Problemas en Alcoy hay muchos y variados (como supongo que ocurre en cualquier ciudad de España). A los estragos que ha causado la crisis,, se unen otros problemas intrínsecos a nuestra ciudad como la falta de suelo industrial; el tercermundista trenecito; las décadas que lleva elaborándose el PGOU (y lo que queda); la falta de definición en zonas como la manzana de Rodes, la fábrica de Monllor o la zona del Tossal; el retraso en proyectos como la calle Entenza, accesos al polígono Santiago Payá o las rotondas en las entradas sur, norte y Bañeres, los mil y un problemas de la Policía Local; el demostrado amiguismo en algunos asuntos como el de la Filá Miqueros o la contratación de algunas obras menores; el caos circulatorio que se nos avecina por la falta de diligencia en las reparaciones del puente Fernando Reig, accesos al Santiago Payá, demoliciones en la Beniata, remodelación del puente de San Jorge, etc. Mil y un problemas que no encuentran su reflejo en las preguntas que aparecen en el programa.

¿Qué temas creen que preocupan a los alcoyanos y, por lo tanto, trasladan a Toni Francés? Pues hasta el año pasado, las cacas de los perros eran el tema estrella, pero como instalaron ¡tres! pipicanes que solucionan el problema en toda la ciudad  (ironía)…  Ahora todo ha cambiado y el mejor tema del que hablar con nuestro alcalde es… ¡las cagadas de las palomas! Como lo leen: más de la mitad de las intervenciones tienen como protagonista las defecaciones de esta ave, símbolo de la paz.


Que yo sepa, palomas ha habido toda la vida en Alcoy. Al menos, durante los últimos 60 o 70 años. ¿”Els colomets” de antes eran más aseados que los actuales? ¿Los alcoyanos nos hemos vuelto unos tiquis-miquis?  Pues no vayamos a París, Venecia o Barcelona que lo pasaremos mal.

¿Es cierta esta obsesión de los alcoyanos por estos pajaritos? Llámenme desconfiado, conspiranoico o como ustedes prefieran, pero ¡qué bien le vienen estas preguntas a Toni para que pase el tiempo sin tratar otros temas!
Sólo espero que los ciudadanos más afectados por las caquitas (ya sean de perro o de paloma) no trabajen para el Ayuntamiento. Sería una lástima que tuvieran que gastarse el dinero llamando a Radio Alcoy cada vez que aparece el Alcalde, ¿no creen?

(Fotografías de spain-center.com y página 66) 


miércoles, 9 de marzo de 2016

Cuatro informes técnicos exculpan a Sedano en las obras del Calderón



A mediados del mes de febrero, y a raíz de una denuncia del actual Ayuntamiento de Alcoy, el Tribunal de Cuentas citó a declarar (comparecerán el próximo 4 de abril) a siete componentes del anterior Gobierno municipal, del Partido Popular, por los sobrecostes en las obras del Teatro Calderón. Concretamente, deberán presentarse en el Tribunal el ex alcalde Jorge Sedano y los entonces concejales Amparo Ferrando, Rafael Sanus, Fernando Pastor, Javier Castañer, Santiago Botella e Ignacio Palmer. Todos ellos participaron en la Junta de Gobierno que el 22 de diciembre de 2008 aprobó el pago a Enrique Ortiz de algo más de un millón de euros por trabajos que más tarde se comprobó que no estaban hechos, que estaban duplicados o cobrados por encima del precio del mercado.


Quien haya trabajado en empresas constructoras que realicen obras para organismos oficiales conocerán el procedimiento: el organismo en cuestión saca a subasta pública una obra, las empresas constructoras presentan sus ofertas y tras estudiarlas los técnicos encargados, se adjudica a la que más convenga, ya sea por precio, duración, garantías, etc. La empresa adjudicataria empieza las obras y las va cobrando con certificaciones (facturas) que presenta a medida que va ejecutando las obras (como si fuese a plazos). Estas certificaciones las comprueban los técnicos del organismo oficial y dictan la orden de pagarlas o rechazarlas. Posteriormente, si son correctas, la administración efectúa el pago a la empresa constructora.  

Con este sistema, los políticos de la Administración se encuentran con las manos atadas (¡afortunadamente!) ya que si los técnicos cualificados ordenan el pago, no hacerlo supondría una denuncia por parte de la constructora por morosidad e incluso prevaricación y si lo pagan sin la aprobación correspondiente, les denunciarían por trato de favor, fraude y no se sabe cuántas cosas más.

Evidentemente, la aprobación de los pagos a Enrique Ortiz en la Junta de Gobierno del 22 de diciembre de 2008 contaba con el informe favorable de los técnicos. No podía ser de otra forma. Y así lo atestigua el Juzgado de lo Contencioso número 4 de Alicante cuando refleja en su sentencia que existían nada menos que 4 informes técnicos favorables (todos los que se hicieron) que avalaban el pago. Además, el Tribunal también refleja que se habría sobrepasado el plazo legal de cuatro años para poder reclamar (recordar que en 2011, dentro del plazo legal de reclamación, llegó a la alcaldía Antonio Francés, ¿por qué no denunció antes?). Por si fuera poco, esta resolución también fue refrendada por el CJC (Consejo Jurídico Consultivo) en dos ocasiones.


¿Por qué la izquierda alcoyana se empeña en culpar a los políticos del PP de los sobrecostes irregulares del Calderón a sabiendas de que son inocentes? Porque a usted o a mi se nos pueden escapar todos los vericuetos legales que las obras públicas llevan tras de si, pero cualquier político que ocupe un sillón en el Salón de Plenos los conoce al dedillo.

Acusan con el único objetivo de desacreditar al contrario político para sacar rédito electoral. Malgastan el dinero de los contribuyentes en juicios innecesarios de los que sólo ellos van a salir beneficiados  políticamente. ¿Gastar dinero público en beneficio personal no es corrupción?  Propaganda con cargo al erario público.  

El actual alcalde Antonio Francés y su equipo de gobierno, ante cualquier problema surgido en las escasas obras que han acometido en los últimos cinco años, siempre se justifican diciendo que han actuado siguiendo los informes de los técnicos municipales. ¿Ahora son buenos esos informes y cuando mandaba Sedano, no? Pues el puesto de técnico municipal no es político; se accede a él por oposición y los técnicos son los mismos que había entonces. ¿Acaso quieren cargarse a algún técnico municipal? ¿Por qué éstos aprobaron certificaciones irregulares? ¿Hicieron su trabajo bajando a la obra y comprobando que eran ciertas? Lo único cierto es que sus firmas irresponsables nos costarán a los alcoyanos más de un millón de euros. 



martes, 27 de octubre de 2015

Así nos engaña Antonio Francés con los presupuestos participativos



Era uno de los puntos fuertes del programa electoral que llevó al PSOE al poder el año 2011: los presupuestos participativos. Una medida con la que se pretendía dar voz a los ciudadanos y que éstos decidieran en qué se gastaría el Ayuntamiento de Alcoy el presupuesto anual.

Al parecer, resultó extremadamente complicado convocar a los vecinos, ya que, pese a los denodados esfuerzos, no se logró hasta dos años después, en 2013, cuando se preparaban los presupuestos de 2014. La cantidad destinada no era nada desdeñable; 271.000 euros, que para un presupuesto total que rondaba los 50 millones de euros “suponía un gran esfuerzo”, según palabras de Antonio Francés; ¡un esfuerzo del 0,5% del total!

A pesar de la escasísima dotación, el objetivo principal ya estaba cubierto con creces: aparecer durante varios meses en todos los medios de comunicación locales vanagloriándose de los avances democráticos que se vivían en nuestra ciudad gracias a la admirable labor de su gobierno. Que luego se llevasen a cabo o no resultaba un objetivo secundario. Y, como tal, no se cumplió. Las  medidas aprobadas fueron:

- Plan integral de accesibilidad. 96.000 euros
- Adecuación solares calle Victor Espinós, Anfiteatro Zona Norte y Parque Romeral. 70.000 euros.
- Instalación energía solar térmica y caldera de biomasa en el Polideportivo Francisco Laporta. 35.000 euros.
- Urbanización calle Caseta Catalá. 10.000 euros.
- Reurbanización Placeta Les Eres. 60.000 euros.

De estos cinco proyectos, a día de hoy, dos años después, aún no se han llevado a cabo ni la primera ni la última, es decir, ni se ha elaborado un plan integral de accesibilidad ni se ha hecho nada en la Placeta Les Eres. Más de la mitad de lo presupuestado se ha perdido en la noche de los tiempos.


Aquello no se podía detener y llegado el otoño de 2014, se volvió a convocar a los vecinos para que hiciesen sus propuestas para el 2015. Esta vez se mostraron más generosos: 400.000 euros, cantidad que ya casi rozaba la estratosférica cifra del ¡1% del presupuesto de Alcoy!

Otra vez toda la parafernalia de  apariciones en los medios de comunicación (su objetivo principal) y "asambleas" con esperanzados vecinos que creían que estaban colaborando con el buen funcionamiento de la ciudad. ¡Ja! Los proyectos seleccionados fueron:

- Tratamiento contra los resbalones en las aceras del Centro (el famoso mármol de Sanus) y en Isabel la Católica. 60.000 euros.
- Acondicionamiento, mantenimiento y gestión de un espacio para realizar conciertos con capacidad para 400 personas. 75.000 euros.
- Habilitación de un huerto escolar en el colegio de San Vicente. 12.000euros.
- Paso de peatones desde la calle Radio Alcoy hasta la calle Perú. 12.000 euros.
- Construcción de un centro cívico para los barrios del Ensanche y Santa Rosa. 241.000 euros.

¿Estado de los proyectos a finales de octubre de 2015? Con un poco de suerte, la comunidad de padres, profesores y alumnos del colegio de San Vicente lograrán acabar el huerto escolar antes de finalizar el año. Del resto de puntos aprobados ni siquiera se ha licitado el proyecto. ¿Quién sabe? Igual le ganan en el tiempo a la remodelación de la calle Entenza o la reforma de la manzana de Rodes.


¿Creen que Antonio Francés se amilanó ante el evidente fracaso que supone la iniciativa de los presupuestos participativos? ¡Nunca! Con tal de aparecer en todas las fotografías y demostrar su indestructible vocación democrática, lo que haga falta. Nueva convocatoria de reuniones vecinales para tratar las propuestas de cara al 2016… y fracaso. ¡Dos asistentes a la primera reunión del Centro celebrada en la Universidad! Y uno creía que asistía a una conferencia.

¡Alarma! En la Alcaldía se asustaron. Aquello no se podía repetir. Afortunadamente, las otras cuatro asociaciones de vecinos eran bastante más afines que la del Centro y obligando a sus directivos a acudir, junto con algún familiar y “voluntarios” llegados desde el Ayuntamiento, han logrado que la sangre no llegue al río. Aun así, no han llegado a 20 asistentes en ninguna de ellas.


¿Los alcoyanos no queremos participar en esta iniciativa? No. Lo que los alcoyanos odiamos es que se nos tome el pelo. Que nos hagan creer que con un mísero puñado de euros decidimos el futuro de Alcoy. Que tengamos que ir a una reunión para escuchar un pobre mitin propagandístico del concejal que ha sacado la pajita más corta y no ha tenido más remedio que acudir. De que los medios de comunicación le den una importancia y trascendencia que, evidentemente, no tiene.  Y, sobre todo,  estamos hartos de que los miembros del gobierno municipal incumplan los acuerdos adoptados y no realicen las actuaciones aprobadas. ¿Quiénes se creen que son para reírse de esta forma de los ciudadanos?


martes, 29 de septiembre de 2015

La recogida de basuras en Alcoy se realizará con motocarros



Intento no perderme el programa de debate que emite Radio Alcoy los miércoles a mediodía. Como muchos lectores ya sabrán, en este programa comparece un representante de cada partido político y hablan sobre dos o tres temas de actualidad que propone el moderador/a del programa.  Ya sé que parece un acto de masoquismo escuchar durante media hora a cinco políticos alcoyanos, pero ¿qué voy a hacerle?, me gusta oír lo que piensa cada uno y, ¿por qué negarlo? me río un buen rato  con sus opiniones.

Esta pasada semana trataban sobre los servicios de limpieza y sobre el nuevo contrato que debe firmarse próximamente (el actual apenas lleva ¡cinco años prorrogado!). Se habló  de la posibilidad de dividir el servicio en limpieza viaria y recogida de basuras; de municipalizar la limpieza viaria; de los maravillosos contenedores que jalonan nuestra ciudad y de los camiones que los recogen.


Fue la discusión sobre este último punto lo que más me impactó (o me hizo reír, como prefieran). Uno de los contertulios, no se exactamente si de Compromis o de Guanyar Alcoi (es difícil saberlo ya que parecen clonados), empezó a criticar los camiones que recogen los contenedores de las calles, tachándolos de auténticos mastodontes, difíciles de manejar, peligrosos al recoger los contenedores (que yo sepa nunca se ha producido ningún incidente; este buen hombre estará mejor informado) y que una vez se había subido a la cabina de uno de ellos (privilegios del politiqueo)  y que parecía “una nave espacial” por la cantidad de mandos que debía manejar el conductor. 
A cambio, proponía que siguiésemos el ejemplo de una ciudad de la provincia de Valencia que recogía desde hace un tiempo los contenedores con camiones pequeños, que les iba muy bien y que habían tenido que contratar a muchos parados de la ciudad para realizar el servicio.  Oyéndole, parecía que al otro 99,9% de las ciudades que utilizan el método tradicional les va mal.  Me hubiese gustado saber el nombre de este contertulio, pero se lo diré de todas formas: Señor X, es usted un LUDISTA.

¿Qué es el ludismo? En la Inglaterra de 1811, en plena Revolución Industrial y con la maquinaria moderna introduciéndose en las fábricas, surge un movimiento obrero denominado Ludismo (o Luddismo) que se opone a toda clase de tecnología pues, según su vertiente ideológica, ésta hace que el hombre pierda su capacidad laboral.  Su forma de actuar era sencilla: exigían al patrono la retirada de las nuevas máquinas. En caso de no hacerlo, entraban en las fábricas y las quemaban. La respuesta del gobierno inglés fue contundente (incluida la pena de muerte para 18 ludistas) y el movimiento empezó a extinguirse hacia 1817.


Esta corriente obrera se fue desplazando por Europa a medida que se extendía la Revolución Industrial y llegó a Alcoy diez años después. Tras numerosas protestas, el primer motín se produjo en marzo de 1821 cuando más de mil obreros atacaron varias empresas (sobre todo la Real Fábrica de Paños) y destruyeron 17 hiladoras con un valor de dos millones de reales. 

Al igual que en el resto de Europa, en Alcoy también se dieron cuenta de que luchar contra el progreso era una estupidez y el ludismo desapareció en pocos años aunque, como hemos podido comprobar, todavía quedan algunos políticos infectados. 

La verdad es que ni ellos mismos se creen  que un sistema de recogida de basuras como el que proponen,  puede ser rentable. Ni siquiera que funcione correctamente. Es pura demagogia y populismo. Creen que tratan con niños (“nave espacial”), juegan con las necesidades de la población (más puestos de trabajo) y el sentimiento de propiedad de las personas (al ser municipal, es de todos). La realidad es que, en el caso de que se municipalizase y se impusiese esta peregrina idea de los camiones pequeños, contratarían a amigotes o a gente de su partido para ampliar la plantilla del servicio y se colocarían ellos mismos en el consejo de administración de la nueva empresa municipal para cobrar sus buenas dietas y asistencias a juntas sin tocar bola. Y mientras tanto, los alcoyanos pagaríamos aun más por el servicio de basuras. Mucho más.


¿Cuánto? Por supuesto que no soy técnico en la materia, pero se manejar un cronómetro y éste me dice que los actuales camiones recogen entre 3 y 4 contenedores cada cinco minutos, o sea, más de 30 a la hora o más de 200 (tirando por lo bajo) en una jornada laboral de ocho horas.  ¿Cuántos podrían recoger con los camiones pequeños si tuviesen que poner y quitar los contenedores uno por uno? No se la respuesta exacta, pero con el tráfico de Alcoy y mientras van y vuelven de sus almacenes, dudo que repartiesen mas de 3 contenedores por hora. O lo que es lo mismo, diez veces menos que con los camiones actuales.  Para que el servicio continuase como ahora (igual de bien o de mal, como prefieran), deberían poner 10 camiones (o 5 y que trabajasen dos turnos) por cada camión “nave espacial” actual.

Y aquí me surgen varias preguntas: ¿están amortizados los camiones actuales como para deshacerse de ellos por las buenas? ¿Sería más barato el servicio (tal como dicen ellos) con 10 camioncitos y 10 asalariados por cada uno de los actuales? ¿Soportaría mejor el tráfico de Alcoy a 10 camiones pequeños dando vueltas o a uno “enorme”? ¿Genera más gases contaminantes y consume más gasoil un camión grande o 10 pequeños? Supongo que alguien me podrá contestar estas cuestiones.

Hace bastantes años, Alcoy contaba con una gran flota de motocarros. ¡Lastima habernos deshecho de ellos con lo bien que nos vendrían ahora para recoger los contenedores! Porque usar burros con alforjas sería maltrato de animales, ¿no?

  

lunes, 11 de mayo de 2015

Toni Francés, 4 años cumpliendo promesas



Mayo de 2011. Con el menor porcentaje de votos que el PSOE alcoyano ha conseguido  en cualquier tipo de elecciones en toda la historia democrática, Toni Francés supo maniobrar en los despachos y pactó con el resto de grupos políticos para derrotar al partido más votado por los ciudadanos y hacerse con la Alcaldía de Alcoy. Un rayo de esperanza para nuestra ciudad, ¡por fin! Empezaba así una legislatura difícil pero apasionante en la que la izquierda alcoyana debía demostrar que unidos durante cuatro años, podían conseguir el Alcoy que todos nos merecíamos.

Al principio se le achacó que la única labor que llevaba a cabo consistía en paralizar-anular-destrozar todos los proyectos que el anterior alcalde dejó pendientes. Pero, poco a poco, demostró que iba a cumplir con su programa electoral desde la primera a la última página. Cuatro años en los que ha solucionado de forma definitiva complicados problemas como el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el insufrible déficit de la contrata de los autobuses urbanos, optimizando hasta límites insospechados las líneas existentes y el nuevo contrato para la recogida de basuras, irresoluble hasta que llegó él.

Pero si por algo ha destacado ha sido por el cumplimiento del 100% de las obras públicas que prometió en su programa electoral, tanto las de su partido como las de sus socios de gobierno. Los cambios han sido tan profundos que, parafraseando a Alfonso Guerra, podríamos decir que  “a Alcoy ya no lo conoce ni la madre que lo parió”.

Les dejo unas fotos del antes y el después de varias zonas de la ciudad completamente transformadas tras el paso de Toni Francés por la Alcaldía. A la izquierda podrán ver cómo estaban hace cuatro años y a la derecha como están en la actualidad. Pueden pinchar en cada  foto para ampliarla y poder apreciar mejor los cambios.


Rosaleda.  Con el mínimo coste posible ha logrado consensuar (incluso con La Carrasca) una reforma digna, cumpliendo con la normativa vigente.



Entrada Sur desde la autovía. Urbanización de los 500 metros existentes entre el precioso puente sobre El Molinar hasta la nueva rotonda que agiliza y hace más seguro el tráfico en este punto. Destaca la portentosa iluminación instalada. 



Antigua Fundición de Rodes. Optimización de esta céntrica y degradada manzana con la construcción de un parque tecnológico, un centro vecinal, una sala de congresos, aulas educativas, etc., etc., etc.



Puente de San Jorge. Profunda rehabilitación que ha puesto en valor este icono alcoyano. En la actualidad se llevan a cabo pequeños trabajos que complementan la gran obra realizada.



CADA. Rehabilitación, ampliación y reapertura de este museo que ha revitalizado la cultura alcoyana. 



Parque empresarial de La Canal. Desechado el  peligroso y especulativo polígono proyectado, se ha aprovechado el terreno para crear un macro parque dedicado a la sostenibilidad de la naturaleza que ha creado más puestos de trabajo que la idea original.



Boulevard.  Urbanización de una auténtica vía verde donde han desaparecido los escombros y las malas hierbas, y  priman los peatones sobre los vehículos.



Chalets de la Fuente Roja. Construcción sostenible de aulas para la enseñanza de la naturaleza y otras dependencias. 



Calle Entenza. Sin costarnos un euro a los alcoyanos (íntegramente pagado por el Ministerio de Fomento tras arduas negociaciones) se ha logrado una remodelación que ha mejorado la luminosidad de la calle, facilitando el tránsito de los vehículos y la seguridad y comodidad de los viandantes. 



Antigua fábrica de los Monllor. Rehabilitación de esta degradada zona con la construcción de un complejo deportivo, auditorio, biblioteca, jardines, zonas de esparcimiento…



Nuevos juzgados. Raudo traslado de los juzgados a este majestuoso edificio con el añadido de haber recuperado de la Generalitat hasta el último euro que se gastó en su construcción.



Polígonos industriales. Dignificación y modernización de los polígonos existentes. Creación de la tan deseada zona industrial de Pagos y exhaustiva colaboración en el desarrollo del  polígono mancomunado de Muro. Además, la rehabilitación de las antiguas fábricas del Molinar ya aparece en todas las enciclopedias de arqueología industrial. 

Y no podíamos acabar la enumeración de los logros de la alcaldía de Toni Francés sin mencionar la obra por la que será recordado y por la que pasará a los anales de la historia alcoyana: los pipi-can instalados en tres parques de la ciudad. 


Ha quedado demostrado: Toni Francés siempre cumple sus promesas.


miércoles, 4 de marzo de 2015

La Carrasca quiere un mausoleo en la Rosaleda



El sainete de la Rosaleda continúa acumulando lamentables episodios. Desde la inicial altanería de Miguel Peralta hasta el “menfotisme” de Antonio Francés, la historia de esta emblemática plaza está plagada de confusiones, populismos, intereses políticos y cobardías. Y todos los desmanes cometidos los pagamos los alcoyanos el día de su construcción, en la actualidad y, mucho me temo que en el futuro.

Lo que iba a ser la necesaria remodelación de una plaza que se encontraba en un lamentable estado (sobre todo en su parte superior, destartalada y totalmente infrautilizada) con el añadido de la construcción de un parking, dotación fundamental para una zona eminentemente comercial, se ha convertido por el dichoso politiqueo de la izquierda local en general y de la Colla Ecologista La Carrasca en particular en una pesadilla que dura ya una larga década.


No podían permitir que el gobierno local del PP continuase saliéndose con la suya. Ya se habían negado con escaso éxito a la construcción del centro comercial Alzamora y del hotel AC y con el parking no podía pasar lo mismo. Primero propiciaron que los dueños de la floristería que había en la esquina inferior (¿alguien sabe porque no se permitió su reconstrucción?) aparecieran en todos los medios de comunicación locales quejándose amargamente por la injusticia cometida con ellos.

Luego denunciaron que al quitar los árboles de la parte baja habían acabado con el punto de reunión de las personas mayores del barrio, el auténtico “hogar del pensionista” del Ensanche. Fotos, entrevistas e incluso pancartas para que estos sufridos y utilizados jubilados aparecieran en los periódicos.

Y por último, tras meses de meticuloso estudio de las farragosas leyes autonómicas (¿de dónde sacan el tiempo y el dinero estos tíos?; ¿será porque tanto su tiempo como sus sueldos los pagamos entre todos?) encontraron un resquicio para poder denunciar la, ya por entonces acabada, obra ante la justicia. ¿El motivo? Que faltaban cuatro palmos de zona verde para cumplir con la normativa y que la entrada del parking tenía una diferencia de altura con respecto a la calle. Y yo me pregunto, ¿acaso los parques de la Font de l´Horta o la emblemática Glorieta no tienen diferencias de altura con las calles adyacentes? ¿Tan grave es este problema? Pues los alcoyanos los hemos disfrutado durante décadas y nos ha importado muy poco este “gravísimo” inconveniente.


Diez largos años que nos han costado un dineral a base de recursos jurídicos, pleitos, abogados, proyectos de remodelación, resoluciones contrarias de un tribunal que se encuentra en Valencia, lejos, muy lejos del problema… y todo para nada.

El último acto ya lo conocen: el avispado Francés, en un nuevo intento de alargar la agonía lo máximo posible para no tener que mojarse, creó un “comité” formado por técnicos municipales, asociaciones vecinales, sindicatos, políticos, empresarios…y La Carrasca, para redactar el último proyecto de remodelación, el definitivo, el que nadie podría rechazar ya que todas las partes implicadas participaban en él. El proyecto, como pueden ver en el plano de obra, es una burla, una repetición del anterior (éste ya es el sexto) quitando los caminos para poder llegar a los metros exigidos de zona verde.


Rápidamente, La Carrasca se ha opuesto (si se han enterado ahora, ¿en qué pasaban el tiempo cuando acudían al comité?) y lo ha vuelto a denunciar ante la justicia, Francés ha echado mano de los técnicos municipales para que se manifiesten a favor de la legalidad de la obra y EU, socios de gobierno de Francés, no lo olvidemos, han puesto en duda la profesionalidad de esos técnicos (el ambiente en el Ayuntamiento debe de ser fenomenal) y se han posicionado del lado de La Carrasca. Un divertidísimo sainete de Armando Santacreu si no fuese por el pastizal que nos cuesta todo esto.¿Creen que si esta obra estuviese en la Carretera del Molinar, en el Castellar o en la Font Dolça, por poner unos ejemplos, todavía estaría en los juzgados? Seguro que no. Pocos conocerían su existencia, ¿de qué serviría hacer ruido?  


Ni con seis proyectos de remodelación ni con diez: a la Carrasca, y por extensión a la izquierda alcoyana, no le importan ni las zonas verdes ni la accesibilidad para las personas discapacitadas; lo único que buscan es la demolición de los accesos del  parking y el cierre del mismo sin importarles el daño que ocasionarían al barrio ni la indemnización que habría que pagarle al concesionario del aparcamiento. Crear un “Belchite” alcoyano en el lugar más transitado de la población para que todos los votantes recuerden lo mal que lo hicieron los peperos. Un mausoleo en el que enterrar al enemigo político para poder perpetuarse en la alcaldía.


Dejémonos de chorradas. Aumenten las zonas verdes con decenas de maceteros y jardines verticales, dejen de darles la importancia que no tienen a ese grupúsculo de oportunistas de La Carrasca, que se autodenominan ecologistas pero que no pasan de tristes sandías y firmen un pacto de no agresión que impida que los alcoyanos nos gastemos ni un euro más en estupideces judiciales. ¿O acaso no se les ocurren mil sitios mejores y necesarios donde invertir el dinero?